Es fundamental comenzar a mejorar nuestras habilidades. Esto nos permite desarrollar las tareas laborales de manera más fluida y programar mejor nuestros horarios. Aprovechemos nuestro día laboral y rutinas de mejor manera con algunos tips:
- Debemos planificar a mediano y corto plazo y no andar “apagando incendios”. Se debe planificar para saber a donde queremos ir o llegar.
- Lo fundamental para administrar bien el tiempo es conocer que cosas o actividades pueden esperar y cuales no (las más importantes, priorizar). Reservar tiempo para las cosas más importantes.
- La agenda, teléfonos inteligentes, correos electrónicos nos ayudan para mejorar el uso del tiempo.
- Debemos estar conscientes entre lo urgente y lo importante. Para evitar esto se deben fijar prioridades entre las distintas actividades del día.
- Una opción puede ser establecer las prioridades de acuerdo a las horas del día. Se puede dejar la mañana para resolver temas contingentes y dejar la tarde para lo de más largo plazo.
- Tiempo perdido: pocas personas logran destinar el 100% de su día laboral al trabajo. Conscientes o inconscientes varias horas de las jornada en tareas que no nos ayudan a nuestro desempeño. En promedio se suelen malgastar 2 horas por día de trabajo. Una de las principales causas: Internet. Un estudio reciente dice que un 44,75% de los encuestados consume su tiempo no productivo en la web. Otras causas son sociabilizar con los compañeros de trabajo y centrarse en asuntos personales.
- Lo más importante para administrar el tiempo es tener una brújula, en este caso una agenda. Identificando lo importante y diferenciando lo urgente. Una vez determinadas se debe asignar el tiempo para planificar y realizar cada una de ellas.
- Esto debe transformarse en un hábito para para brindarnos tranquilidad y mayor tiempo disponible.
Ayuda con pasos básicos para administrar mejor el tiempo:
- Establecer objetivos de forma clara y planificada
- Organizar la vida personal y profesional
- Evitar interrupciones
- Aprender a delegar
- Saber decir no a visitas inesperadas
- Concentrarse unicamente en una tarea y no en cientos a la vez
“Si no planificamos nuestras actividades consumimos el recurso tiempo improvisando”.
- Intentar poner tiempos a cada actividad. Cuando una actividad sobrepasa el tiempo estimado, se debes intentar mirar “desde afuera” para encontrar la causa de la situación y tratar de resolverlo. Sino continuar con la próxima actividad para no generar una cadena.
- Incentivar trabajo grupal para dar más dinamismo al trabajo.
- Dedicar tiempo sólo a actividades alineadas a nuestra prioridades. Saber qué se hace con el tiempo y cómo se hace. El qué, son los requerimientos que surgen día a día y el cómo, se relaciona a cuan eficiente es el uso del tiempo disponible.
«Identificar las actividades importantes y basarnos en esto para establecer prioridades».
Otros tips para cuidar tu desempeño laboral:
- Hablar frente al público: comienza a practicarlo y a enfrentarlo, afina esta habilidad. Desde revisar discursos de personas importantes en YouTube hasta practicarlo algunos minutos frente a un espejo en tu hogar.
- Informarse y tener conocimiento sobre la empresa en todas sus áreas. Si toda la información de la empresa está en otro idioma, utiliza diccionarios, traductores, busca en internet, etc.
- Estar informado(a) y actualizado(a) con noticias o temas interesantes del rubro. Conocer lo que sucede dentro y fuera de la empresa. Tener información para opinar y poder hablar de estos temas en diferentes instancias. Algunas ideas: tendencias del rubro, por ejemplo, y dar comentarios asertivos durante reuniones.
- Antes de asistir a reuniones grupales o juntas de equipo es bueno estar preparado, darse un tiempo para actualizarse. Revisar la pauta, para tener preguntas, consultas, opiniones, tanto para comentar como preguntar.
- Mantener limpio, ordenado tu lugar o espacio de trabajo. Das una buena impresión de higiene y autoestima positiva. También te permite tener a mano documentos, archivos relevantes, datos a tiempo ante alguna duda.