Recuerda lavar bien las frutas y verduras con agua potable antes de prepararlas y consumirlas.
- Comienza el día con una fruta natural o un jugo de fruta sin azúcar.
- Bebe 6 a 8 vasos de agua al día, tomar agua te ayuda a aliviar la sed, te cuida y te hace sentir mejor.
- Lleva contigo siempre una fruta para momentos de hambre y así puedas consumirla en ese instante.
- Consume al día por lo menos 2 platos de verduras y 3 frutas de distintos colores. Consumiendo frutas y verduras todos los días, estarás aprovechando los recursos que nos estrega la naturaleza y cuidando tu salud.
- Cuando quieras comer un sándwich agrégale verduras como tomate, pepino o lechuga para hacerlo más saludable.
- Come 3 veces durante el día productos lácteos como leche, yogur, quesillo o queso fresco, en lo posible siempre que sean semidescremados o descremados. Estos te ayudarán a tener huesos más fuetes y sanos.
- Reemplaza el consumo de carne por porotos, garbanzos, lentejas o arvejas por lo menos dos veces por semana.
- Controla tus niveles de colesterol, optando por alimentos con menor contenido de grasas saturadas y colesterol.
- Consume pescado por lo menos dos veces por semana, preferencialmente prepáralo cocido, al horno, al vapor o a la plancha. El comer pescado ayuda a mantener sano tu corazón.
- Importante es la disminución de tu consumo a diario de sal y azúcar. Puedes optar por sal baja en sodio o edulcorantes naturales. Al comprar productos revisa las etiquetas y opta por alimentos bajos en sal, azúcar y grasas.